Una sartén de hierro siempre es una necesidad en cualquier cocina que se precie de que lo moderno es compatible con lo tradicional, y en esta ocasión le daremos un uso práctico que van a adorar: la usaremos para hornear el pastel más delicioso que probarán salido de esa sartén, y se trata nada más y nada menos que un tradicional pastel con azúcar glas, harina, huevos y manteca vegetal hacen de este pastel una casi comida de ángeles, y lo podemos acompañar con nuestro café de la mañana.
Ingredientes
- 1/2 taza de manteca vegetal
- 1 taza de leche
- 1 1/2 cucharaditas de extracto de vainilla
- 2 tazas más 2 cucharadas de harina
- 1 1/2 tazas de azúcar granulada
- 4 cucharaditas de polvo de hornear
- 1 cucharadita de sal
- 4 claras de huevo grandes
- Azúcar glas para espolvorear
Procedimiento
- Batimos la manteca y la leche durante unos 3 minutos, (se tendrá que ver como si fuera cuajada de queso) enseguida agregamos la vainilla.
- En un recipiente aparte mezclamos la harina, el azúcar, el polvo para hornear y la sal. En este punto vamos a añadir la harina, un tercio a la vez a la mezcla de leche, mezclando bien después de cada adición.
- Por último, añadimos las claras de huevo, batiendo hasta que esté todo combinado.
- Vertemos la mezcla en una sartén de hierro de unos 24 centímetros previamente engrasado y enharinado (no se recomienda utilizar un spray antiadherente).
- Hornearemos en el horno precalentado a 170 grados durante 40-45 minutos, utilizando un palillo insertado en el centro para comprobar el punto de cocción.
- Una vez horneado, dejaremos enfriar fuera del molde durante al menos 45 minutos antes de servir, y para terminar clásicamente espolvorearemos ligeramente con azúcar glas.
- Si no disponemos de una sartén de hierro, podemos usar cualquier molde para hornear de toda la vida.
Rinde para 8 personas.
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